La Guerra de Afganistán, la deshumanización del periodismo hoy día, la crisis en las redacciones de los diarios o la necesidad de emisoras públicas independientes fueron algunos de los temas que se trataron durante el evento
Deshumanización
A este respecto, Rodríguez aludió al tema de la deshumanización del periodismo: “lo importante es qué se considera noticia, ya que el hecho de que todos los días mueran iraquíes no es importante en una redacción ni si es un número escaso de muertos. Y eso ocurre porque cada vez menos periodistas están en el terreno. Si el director del periódico estuviese en esa guerra sí lo entendería porque para explicar una realidad hay que vivirla; no explicar una guerra como si fuera una peli de acción”
En definitiva, cuando la prioridad principal de un medio de comunicación deja de ser la información de calidad, empieza a haber recortes, se cierran corresponsalías y se recorta la figura del enviado especial, ya que se comienzan a utilizar las agencias de información internacional (Reuters y AP). Sin embargo, las repercusiones de esta situación, tal y como confirma Rodríguez, son la “uniformidad de la información, ya que vemos la realidad sólo a través de dos grandes ojos, no hay pluralidad. Por eso, ahora es impensable estar en una redacción y pasarte unos cuantos meses como corresponsal en un país extranjero”.
Defender derechos humanos
Otro de los problemas del periodismo actual que detecta esta periodista es la ausencia de partidismo en defensa de los derechos humanos. Es decir, a su juicio, “no se puede situar al mismo nivel al asesino/asesinado, violador/violado, etc… y, desde el periodismo, en los conflictos debemos ser más consientes de ellos y tomar más partido por la solidaridad y los derechos humanos”.
Sociedades libres
Haciendo una comparación con la situación de la Televisión Griega y la necesidad de una emisora pública en nuestro país, el periodista de la Agencia EFE opina al respecto que la información es un derecho que tenemos como ciudadanos y deber ser eficaz, al igual que transmitir la realidad lo más neutral posible, es decir, que sea pública, de todos y comprometida con los derechos. En este sentido, Martín aconseja que “hay que defender que tengamos medios públicos, independientes, que defiendan los derechos de los ciudadanos, por la razón de que sólo la información hace sociedades vivas. Cuanto más sepamos y transmitamos, tendremos sociedades más cultas y menos manipulables, más concienciadas y sanas”.